Wednesday, July 26, 2006

Cambio de rumbo

Me voy de vacaciones! Será bueno para mí, aunque no podré actualizar seguramente con la frecuencia a la que os he acostumbrado. Así pues, aunque me gustaría seguir haciéndolo a diario, durante doce días puede tanto que haya pleno, como que no haya ninguna actualización.

Que mejor equipo para tratar que los Warriors para un día como hoy. Por desgracia ya gasté este cartucho, así que voy a por otro eterno vacacionero que en el pasado año sorprendió a propios y extraños con su clasificación para los Play-Off; y aún más cuando, una vez allí, tumbaron a los Denver Nuggets y casi dejan fuera de la final de conferencia a los Phoenix Suns.

Obviamente, ya llegados al tercer parágrafo lo desvelaré, me refiero al equipo de Los Angeles. Perdón, el eterno segundón de la ciudad: Los Angeles Clippers.

Después de toda una historia de mediocridad en su paso por Buffalo y San Diego, las cosas no cambiaron con Sterling como propietario en la ciudad más importante de California. Pocos Play-Off, jóvenes que no duraban más que su primer contrato, aficionados que no se tomaban en serio su equipo...todo eso ha cambiado, o al menos lo parece.

Principal culpable de todo el fenómeno Clipper es Elton Brand, el jugador que en su día los Bulls regalaron al único equipo que antaño podía hacerles sombra como el peor de la NBA. Allí hizo un 20-10 por temporada, pero junto a compañeros como Corey Maggette no llegaron los Play-Offs. Con los mismos promedios hasta ahora, en que después de siete años ha vivido su primera experiencia más allá de abril.

Un joven Kaman del mejor Draft de la historia, Cuttino Mobley como agente libre y Cassell a cambio del peor base calidad/precio de la liga (Marko Jaric), fueron los ingredientes a mezclar en una gran receta. Aún así pocos eran los que se convencieron de lo que estaban haciendo los Clippers. Y es que nunca se valora una cosa hasta que está terminada.

Habrá que ver si pesa más la luz de la 2005-06, o los más de treinta años de fracaso Clipper (antes Braves) en la liga. Yo creo en ellos pero, ¿quien no lo haría después de lo que acabamos de ver este año?

PD: En principio con este de los Clippers os dejo. Id pasando por aquí, si hay suerte cuelgo uno mañana, o pasado o, como máximo, dentro de doce días. Hasta pronto y a disfrutar el verano!

Tuesday, July 25, 2006

El alma de los Bulls

Seis anillos en seis finales...cinco premios de MVP en su haber...cuatro dorsales retirados...tres grandes protagonistas...dos, los anillos que concedieron entre ambos three-peat...uno, el más grande de todos, cuya leyenda no tiene límites.

Los Bulls de Chicago, el ángel vestido de rojo, el equipo que enamoró a todos los aficionados, y odiaban todos los rivales. Pistons, Cavaliers Knicks, Magic, Heat, Pacers...Lakers, Portland, Phoenix, Seattle y Utah; solo unos cuantos de todos aquellos que en Play-Off se vieron arrollados por su majestad Michael Jordan.

Junto a él, Scottie Pippen y Phil Jackson ganaron seis anillos. Lo de Jackson es otra historia, pero todo lo que el 33 tiene en su currículum se lo debe a Mike. Horace Grant, BJ Armstrong, Dennis Rodman, Ron Harper, Toni Kukoc...peones de calidad, pero todos al servicio de Air.

El 23 de los Bulls dejó tras de sí un camino lleno de vuelos, canastas imposibles, víctimas destrozadas y rivales que se rindieron a sus pies. Suya es la culpa que los Barkley, Ewing, Malone, Stockton o Miller no tengan su preciado anillo de campeones. Los más grandes en su tiempo, ninguno pudo con Jordan.

Y si hoy hablo de los Bulls es sólo por él. No serían elogios ni admiración lo que les dedico, de no ser por Mike. Irían para Portland, el equipo que prefirió la elección del mediocre Sam Bowie al mejor jugador de la historia.

Seis anillos en seis finales. Ningún ejemplo más claro de que en una época de gigantes, Michael Jordan fue un coloso. Solo durante dos años viví de aquella magia sabiéndome, con ocho años, el roster del equipo de la Windy City. Longley, Rodman, Pippen, Jordan, Harper, Wennington, Kukoc, Caffey, Buechler, Kerr, Brown, Simpkins...Aún hoy, sin trampas, recuerdo estos doce. En mi caso, son los únicos doce de cualquier franquicia actual o pasada que puedo nombraros.

No hay más que hablar; quien tiene interés alguno por los Bulls anteriores al Draft del 84, o los que vinieron después de Air y, hasta hace dos años, se arrastraban por la liga. Para mí y muchos aficionados de la liga Chicago es, y siempre será, Michael Jordan. De momento, todo lo que cuelga del United Center es por mérito suyo.

Monday, July 24, 2006

No hace tanto, tanto tiempo

Arnie Risen, Bob Davies, Jack Coleman, Bobby Wanzer...algunos de los campeones con los Rochester Royals, en 1951. No sería un mal comienzo, pero no hablaré de ellos.

Hoy, con voluntad de homenaje a lo que me han hecho vivir, dedico el artículo a los Sacramento Kings, o a los que yo he conocido. En mi primera temporada estaban Abdul-Rauf, Polynice y Mitch Richmond, jugador que se me dio a conocer gracias a la portada del NBA Live 97. Sacto, con dos entrenadores a lo largo de la temporada, quedaría fuera de aquellos Play-Off.

Hasta dos años más tarde, en la temporada del lock-out, no vería al monarca de California más allá de la Regular Season. Empezaba el reinado de los Webber, Divac y Williams, y Stojakovic era tan sólo una pequeña muestra de todo lo que acabó siendo. Rick Adelman era el maestro, el creador de sueños.

Aquel equipo maduró, explotando un atractivo juego ofensivo, basado en los contraataques, los alley-oops y los pases por la espalda. Con el base más talentoso de la liga, un escolta que defendía bien y completaba contraataques, un frío tirador yugoslavo y la pareja de pivotes con más talento que la liga jamás ha conocido...no hay palabras para describirlo, aquello se vivía, se disfrutaba. Buen baloncesto en estado puro, elegancia en cada partido, algo así solo podía terminar en anillo...pero no fue así.

Los Lakers cortaron de raíz el sueño en el séptimo partido de la final del oeste en el año 2002. Una final anticipada, ya que los Nets no opusieron resistencia alguna para evitar el barrido. Mr May Robert Horry se encargó de convertir en mito, su ya legendaria carrera de Play-Off, con un tiro que acabó con el sueño de los Kings, y de todos los seguidores de la NBA. Ya no estaba Jason Williams, pero en Mike Bibby no cambiaba la esencia.

Ni un seguidor Laker como era yo en aquella época se alegró de aquello. Nunca un equipo me ha hecho sentir lo que hacían los Kings. Fue un deprimente final para un equipo que sabía a gloria, el principio de un declive que afectó tanto a la franquicia como a sus héroes.

Que habrá sido de todos ellos? Empecemos por arriba. Vlade Divac es ahora “director” técnico de la sección de baloncesto de la casa blanca; un buen marrón, vamos. Chris Webber comparte vestuario con el más jugón de la historia y, aunque sobrados van de talento, no consiguen meter los 76ers en Play-Off. Stojakovic ha bajado su nivel desde hace dos años y ya no parece aquel jugador que luchó por ser MVP. El escolta, Doug Christie, es maltratado por su esposa y ya no tiene minutos en la NBA. Y finalmente, Mike Bibby es el director de los nuevos Kings, que han dejado su gran estilo de juego a los Suns y se han pasado a la moda Bad Boy de finales de los ochenta.

Y no nos olvidemos, el entrenador Adelman se encuentra ahora sin trabajo. Así pues, de toda esta historia, el que ha salido mejor parado ha sido Chocolate Blanco. El que sobró en su camino hacia el anillo, y que ha terminado consiguiendo su premio en Florida, en las playas de Miami.

Ha muerto una leyenda, pero no su espíritu. Por el bien del baloncesto, esperemos que no sean Suns y Kings, los últimos en cultivar tal estilo de juego.

Sunday, July 23, 2006

Más magia que anillos

Con pocas ganas de documentarme, voy a por un equipo que conozco, un equipo de ensueño y fantasía, los Orlando Magic. El segundo de Florida, se podría decir que su brillante andadura por la NBA comenzó en la década de los noventa.

Con el dudoso honor de ser el único equipo que no ha ganado el anillo con Shaquille O’neal, han paseado por la liga calzados en su azul uniforme jugadores de la talla de: Penny Hardaway, Tracy McGrady, Grant Hill, Steve Francis...precisamente con Shaq, Penny y buenos complementos (Grant-Anderson-Scott), llegaron a la única final de su historia, en el año 95. Cayeron ante los Rockets por barrido, y sin aprovechar una oportunidad que no se les podía escapar. En el siguiente, subcampeonato del este. Nada que decir de la derrota, jugaban contra los Bulls...

Con la huída de O’neal y posteriormente de Hardaway, el desengaño llegó a una ciudad que no estaba preparada para vivir sin magia. Sus responsables se pusieron manos a la obra para traer en verano del 2000 a Grant Hill, Tracy McGrady e incluso se permitieron el lujo de tantear a un Tim Duncan aún sin MVP’s, y con un solo anillo en sus dedos.

El que en mi opinión fue el segundo proyecto de asalto al título para la franquicia, acabó pronto, con un T-Mac quemado y sin haber conseguido pasar una primera ronda de Play-Off, un Grant Hill lesionado y unos complementos que, más que, eso eran pura decoración.

Sin querer entrar en el capítulo Francis, los Magic miran al futuro con un poco de optimismo, que reside en los hombros de un chico de apenas 20 años, Dwight Howard. Con él, Nelson, Milicic, Reddick y lo poco que pueda dar de sí Grant Hill si no es traspasado, pueden llegar tiempos de Play-Off. Y a partir de ahí, ¿quien sabe?...Será la magia de Howard, la que nos de la respuesta.

Saturday, July 22, 2006

Oh, Canada!

Cerca del Niagara, casi haciendo frontera con los Estates se halla la ciudad de Toronto (Ontario). Perteneciente al selecto club de ciudades NBA que he visitado (New York, Salt Lake City, San Francisco y Los Angeles), se ha quedado como la única situada en el país del vecino de arriba.

Un equipo que comenzó su andadura en la liga un año antes de que yo la siguiera, con un uniforme que, salvo gustos personales, todos recordamos. El púrpura y el blanco grisaceo, con el logo del dinosaurio y las marcas de las garras atravesándolo verticalmente, que tan gravado quedó en nuestras retinas. En aquelle época no era singular, su protagonismo en la liga era compartido con Vancouver, y su dimensión, aún el rookie del año (Stoudamire), muy pequeña.

No sería hasta la llegada de uno de los mejores jugadores que he visto en la liga, Vince Carter, cuando los dinosaurios dieron un espectacular salto a lo más alto del protagonismo de la liga. El 15 convirtió la franquícia en objeto de portadas, titulares en los periódicos, y halagos en todos los medios...se ganaron el respeto en un concurso de mates, pero sus metas estaban más arriba, en los Play-Offs.

En el año 2001 pasaron de primera ronda y forzaron el séptimo partido ante los 76ers de Allen Iverson. La suerte no se alió con Carter, y con mucho honor cayeron contra el campeón del este, el equipo del MVP.

A partir de aquel momento las hazañas de Vince fueron a menos, hasta protagonizar su traspaso en los Nets, la temporada 04-05, y dejar el moribundo equipo en manos del jovencísimo Chris Bosh. En vistas a la siguiente temporada, dispuestos a reforzar sus alianzas con el país (ya con los Grizzlies en Memphis), canviaron el púrpura por el rojo y la garra por la hoja. El inicio no fue bueno, pero en la recta final dejaron buena impresión, para este curso.

Un italiano como el 1 del Draft, el crack europeo del Maccabbi, el MVP de la final ACB, Nesterovic la renovación de Bosh, el intercambio de Villanueva por Ford...movimientos de Colangelo, con buena pinta, y con cierto sabor europeo. Todo para volver a los Play-Offs, y construir un ilusiónante futuro en la más americana de las ciudades canadienses.

Todo hecho para construir un futuro, un nuevo dominio de los dinosaurios.

Friday, July 21, 2006

¿Adios a la ciudad de la lluvia?

Dice la leyenda, que en una fábrica de la Boeing ubicada en Seattle se construía un avión al que se quería llamar el SuperSonico. El proyecto nunca se hizo realidad, pero dio nombre a la primera franquicia en el deporte profesional que veía la ciudad de la lluvia.

Mucho ha llovido desde entonces, y más en la ciudad de Starbucks, hasta ver a los Sonics de hoy en día. Un equipo que en dos años ha demostrado ser capaz de lo mejor y de lo peor, una franquicia que en los últimos año se ha mostrado irregular y cuyo balance roza el 50% de victorias.

Con un anillo conseguido en 1979, con Gus Williams, Dennis Johnson y Jack Sikma liderando al equipo, nunca ha vuelto a contar con los ingredientes necesarios para repetir tal hazaña. Dejaron escapar su oportunidad en la campaña 93-94 con un balance de 63-19 al caer ante los Nuggets, contra todo pronóstico. Dos años más tarde, y con una victoria más en temporada regular, llegaban a su última final de la NBA. Perkins-Kemp-Schrempf-Hawkins-Payton; uno de los pocos quintetos que recuerdo de mi infancia como seguidor de la NBA. A decir verdad, el único junto al de los Bulls y los Lakers. Me gustaban aquellos Sonics, aunque yo los descubrí un año más tarde, en mi debut como seguidor NBA (96-97).

Con 64-18 una campaña solo puede terminar en título...siempre y cuando no te encuentres con los Bulls del 72-10. Así pues, Perkins, Schrempf y Hawkins se retiraron como sónicos sin anillo, Kemp empezó a flirtear con el sobrepeso y el alcohol y Payton se convirtió en un mercenario que hasta hace un mes no tenía anillo. Vin Baker llegó a un equipo que ya empezaba a decaer, y que no consiguió Play-Off en la temporada del lock-out.

Por otra parte, los Sonics son de los pocos equipos que han mantenido una fidelidad al largo de los años a sus colores (verde y amarillo), excepto a finales de los noventa, cuando un rojo vino se coló en la gamma del equipo de Seattle.

La 2004-05 fue esperanzadora. Ray Allen era aspirante al MVP y Rashard Lewis cumplía uno de mis sueños, verle en el All-Star. Se comieron a unos Kings que terminaban un ciclo en primera ronda, y con honor cayeron en segunda ante los campeones, San Antonio Spurs. Pero por lo que se dice, el viejo propietario no quería destinar mucho dinero en el equipo, se dejó escapar a McMillan y en abril, como pasa en estos casos, estaban de vacaciones.
Ahora se habla de un traslado a Oklahoma City. El nuevo propietario puede contemplarlo, a no ser que las autoridades de Seattle hagan algo al respecto. De no ser así, el 40 aniversario de los Sonics puede que se celebre en la actual ciudad de adopción de los Hornets. Y Oklahoma City Sonics no me suena muy bien...

Thursday, July 20, 2006

Bambi vuelve a ser verde

Aún con algunos problemas con internet, por fin me puedo conectar. Así pues, dedicaré mi tiempo de hoy a un equipo que a la mayoría nos deja frios, pienso. Ya me lo direís, pero no conozco absolutamente a nadie a quien le gusten los Milwaukee Bucks. Veremos si el nuevo logo y uniformes enganchan, por fin, al público de aquí.

La historia de los Bucks se podría definir como un llegar y romper. Tener la suerte de disponer del numero 1 del Draft en la llegada de Lew Alcindor, llamado tambien Kareem Abdul-Jabbar, no tiene precio. Gracias a tal figura, en el tercer año después de su creación ya consiguieron ganar el anillo de campeones. Por cierto, el único de su historia, en 1971.

Los años setenta, hasta la huída de Abdul-Jabbar y la previa retirada de Robertson, dejaron un buen sabor de boca en la germana ciudad de Wisconsin. Tampoco fueron malos los ochenta, en que llegaron en más de una ocasión muy lejos en los Play-Offs, aunque sin conseguir volver a una final de la NBA. Unos grises noventa, con un cambio de uniforme que pasó del verde y rojo al púrpura y verde, dejaron a los Bucks con una buena plantilla al final del siglo XX.

Este equipo, liderado por el mejor back-court de la época (Robinson-Allen-Cassell), culminó su gran historia al llegar a la final de conferencia, y perder con unos 76ers, que junto a Celtics han sido sus malditos históricos. Allen por Payton (se podría decir nada), Cassell a los T-Wolves y Robinson de trotamundos, dejaron a los Bucks con un segunda ronda del Draft (Michael Redd), y pocas joyas más.

TJ Ford y, dos años más tarde, Andrew Bogut con el número 1, más la inclusión de Simmons, devolvieron a los de Milwaukee en territorio de Play-Off, donde poca resistencia pudieron presentar a los Pistons, que defendían su título de conferencia. El traspaso de Ford a cambio de un talentoso Villanueva, da a los nuevos Bucks más consistencia interior, para volver a dar guerra en postemporada.

Un equipo que mira al futuro con optimismo, y con un look renovado, para dejar atrás el maldito púrpura, un color que no iba ni con las raíces, ni con la identidad de la franquícia.

Me gustaran los nuevos Bucks? No dudeís ni por un momento que al menos podré ver sus partidos, ya que hasta ahora siempre los había visto vistiendo igual de mal. Lo único del viejo look que merece pasar a la historia es el parquet del Bradley Center, sin duda uno de los más elegantes del mundo NBA.

Wednesday, July 19, 2006

El año del lince naranja

Me gustan estos Bobcats. Con dos años en la liga, pocos fuera de North Carolina podemos afirmar que seamos de la franquícia del lince, pero seguro que muchos tienen cierta simpatía por la franquícia orange. Omitiendo el uniforme, en el tiempo que lleban en la liga los B'Cats se han movido bien. Las elecciones de Okafor, Felton, May y Morrison, son buena muestra de ello.

Vamos a hacer un pequeño análisis de sus Draft: primer año, con el número 2 después de un traspaso eligen a Okafor. Alguien mejor por debajo de él? Puede que en un futuro Ben Gordon, pero visto lo visto, dejando a parte las lesiones, fue una buena decisión. Año 2: Felton, que mejor queda por debajo de Felton? Villanueva. Y por debajo de May? Está haciendo una gran liga de verano en Orlando, y sólo justificaría su no elección si hubieran seleccionado a McCants (ya tenían a Felton), o a Granger (con Gerald Wallace en el equipo, no era la mejor opción).

Este año eligen a Adam Morrison, un tanto inesperado teniendo en cuenta que los analistas apostaban por Tyrus Thomas o Rudy Gay. Con el joven de Gonzaga, Wallace, May, Felton, Okafor y Knight (si se queda), hay suficientes convinaciones para hacer un buen quinteto titular.

Para mí tienen al rookie del año. Es mi favorito, aunque tambien creo en Brandon Roy o Rudy Gay. Si las lesiones respetan a la pareja interior (Okafor-May) y Felton mantiene o sube el nivel mostrado a final de temporada, hay suficientes argumentos para aspirar a ver unos Bobcats por encima de las 30 victorias.

Aunque, a lo mejor, este no es el plan de Bickerstaff. Nos encontramos en año de transición, a punto de ver un Draft con nombres que, se dice, pueden cambiar la NBA. Quizás en Charlotte esperen un año en el pozo, para así ver un Oden, Durant, Noah o Mayo en su plantilla la próxima temporada.

De todas formas, pienso que este año, en la Conferencia Este, el tapado viste de naranja. Y en mi opinión, si les respetan las lesiones, dejarán muy atrás a Hawks o Knicks. Y a todos aquellos que pongan en duda sus posibilidades.

Tuesday, July 18, 2006

Houston, ¿tenemos un problema?

Un amigo mío es de los Rockets. Se dejó seducir por la magia de Hakeem, el carisma de Drexler, y la lengua de Barkley. Su afición por el equipo nació en pleno dominio Bull, período en el cual la mayor alegría que tuvieron los aficionados de Houston fue una final de conferencia que saldaron con derrota frente a los Jazz.

La casualidad o el destino, quisieron que los Rockets de San Diego recalaran en Houston, ciudad donde está ubicado el centro espacial de la NASA, y lugar en el que se presenta muy adecuado el nombre. Leyendas como Tomjanovich, Moses, Ralph Sampson, Robert Horry (un tío que tiene 6 anillos con tres equipos, merece ser leyenda) y los más recientes Francis, Mobley, McGrady y Yao.

Dos anillos conseguidos gracias a las aptitudes de Michael Jordan por el béisbol, es todo lo que puede presumir esta franquicia que perdió dos finales contra los Celtics de Larry Bird. Sus víctimas fueron los Knicks, y los no más afortunados Magic de Orlando. O lo que es lo mismo: Ewing, Starks, Jackson, O’neal, Hardaway...todo para que Hakeem y un año más tarde Drexler pudieran ganar su preciado anillo. En su búsqueda llegó años más tarde el maldito Charles Barkley, que entró sin premio en el Hall of Fame.

Con Shane Battier llega un hombre de equipo a una plantilla que, por nombres, puede aspirar a todo. Mis dudas están en los banquillos, y en la respuesta de un McGrady que cada año veo más frustrado, más cansado.

Van a sudar en el oeste, y más en su división. Los Mavericks defienden el título de la conferencia y los Spurs quieren volver a reinar. Los Grizzlies han hecho una arriesgada apuesta de la que pueden salir muy beneficiados, y New Orleans parece haberse reforzado bien. Pueden verse en Play-Off fácilmente, pero los Rockets también son candidatos a la cola de su división.
No me cae bien Houston, aunque es mi favorito de los de Texas. Como este año tendrán dos titulares All-Star y el lujo de estar de vacaciones en abril.

Monday, July 17, 2006

Todos para uno y uno para todos

O dejemóslo en todos para uno. Así de bien pinta el futuro de los Cavaliers, un equipo que va a verse obligado a conseguir una plantilla para rodear a la estrella, el elegido, el que debe darles el primer anillo: Lebron James.

Si alguien puede conseguir que los Cavs, fundados en 1970, consigan el preciado premio es él. La calidad demostrada, con tan sólo 21 años, le hacen valedor de tal responsabilidad, la más grande que puede pesar en los hombros de un jugador.

La mejor máquina de la liga deberá empezar a poner de su parte, ya desde noviembre. La sombra de Dwyane Wade, compañero de generación y rival en el trono del mejor de la liga, defensará el título junto a sus Heat. Ya hay quién, creedor de hacerlo sobre seguro, apuesta por un Miami-Cleveland en la final del este. Yo me uno a ellos, pero ganarán los Heat.

De repetir temporada, y colocar a sus Cavs en uno de los tres primeros puestos del Este, The Choosen One se llevará el MVP de la temporada, a unirlo con su trofeo en el All-Star.

Hay quién le acusa de inmaduro, de un Kobe Bryant más. Pero el 8 de los Lakers no tenía sus numeros a su edad, igual que James no tiene un Shaq Attack en su pintura.

Veremos como se mueven en verano. Un signo de la confianza de James en la franquícia es la renovación por solo tres años. Este es el margen para ser campeones, de lo contrario, rescaten aquel viejo rumor sobre su marcha a los Brooklyn Nets.

Así pues, este es el destino de los Cavs. Vivir y triunfar, o morir y hundirse, y siempre con Lebron James.

Sunday, July 16, 2006

El equipo de todos

Así era la pasada temporada; todos íbamos con los New Orleans/Oklahoma City Hornets, uno de los conjuntos que mejor se ha reforzado este verano.

Empezaron sus andaduras en el año 1988, en el que nací yo, como una de las cuatro franquícias que en cuatro años se incorporarían a la liga (junto a Miami, Minnesota y Orlando). En Charlotte, nacieron los Hornets, un equipo que ya en el año 1993 llegaron a Play-Off, con dos de los mejores jugadores de los años 90: Larry Johnson y Alonzo Mourning.

Los refuerzos seguían su curso hacia Charlotte, un equipo por el que pasaron hombres como Vlade Divac, Jamaal Mashburn, Glen Rice, Eddie Jones, Baron Davis...En la temporada 2002-03 se consumó el traslado a New Orleans, pero el cambio de conferencia no llegaría hasta dos años más tarde.

La 2004-05 fue infernal para unos Hornets, que no se adaptaron a la nueva conferencia. Traspasaron a Baron Davis, y a Jamaal Magloire en verano. Y precisamente en verano, el huracán Katrina arrasó la ciudad en que jugaba el equipo. El propietario Shinn optó por un traslado temporal, y Oklahoma City acogió el equipo.

Otra temporada que pintaba mal la han convertido los Hornets en esperanzadora. El impacto de Chris Paul y su lucha por entrar en Play-Off hasta el final, han propiciado la llegada al equipo de agentes libres de la talla de Peja Stojakovic o Bobby Jackson. Hay esperanzas de llegar a Play-Off, y en el horizonte se dibuja el retorno a casa...y el All-Star 2008.

Saturday, July 15, 2006

Jazz en la ciudad del lago salado

Turno hoy para los Uties, que siguiendo la línea marcada ayer, entran en el club de equipos que podrían cambiar el nombre. Y es que Jazz era un nombre apropiado para la franquicia en sus orígenes, New Orleans, pero que desde luego no tiene mucha relación con la ciudad de los mormones.

Allí estuve el año pasado, viendo infinidad de iglesias, caucásicos y mujeres con falda. Realmente no es la ciudad más interesante de América, pero para un fan de la NBA toda ciudad con equipo merece la pena. Así pues, mi templo sagrado por ver era el Delta, testimonio del cuál estaba la estatua de John Stockton. A lo mejor llegué demasiado pronto, y no pude ver la de Malone. Por cierto, que justo delante de la puerta principal está una calle dedicada al mejor base de la historia de la franquicia.

No me gusta mucho Utah (aclaración, el estado no está mal, lo que no gusta es la ciudad del lago salado) pero respeto mucho a la franquicia en sus orígenes. Fundada en 1974, tuvieron la suerte de fichar a Pistol Pete Maravich, anterior jugador de los Hawks. En cinco temporadas nunca llegaron a Play-Off, y la franquicia se fue al remoto estado de Utah, que no tenía equipo en ninguna de las grandes ligas.

Ya sin Maravich, Rest in Peace, en el equipo, la postemporada no llegó hasta la temporada 1983-84, con Mark Eaton, Darrell Griffith y Larry Nance, entrenados por Frank Layden. Y para sorpresa de todos, viéndolo veinte años después, podrían elegir a uno de los 50 mejores de la historia en aquel Draft, John Stockton. Volverían a Play-Off y aprovecharían su Draft del 85 para seleccionar a Karl Malone.

Esta pareja que un día se reunió accidentalmente, se convirtió durante casi veinte años, en una de las más poderosas de la liga, logrando ya con Sloan de entrenador, dos campeonatos de la Conferencia Oeste. Cayeron en las finales contra el mejor, un coloso que en las grandes citas, nadie ha podido dominar, ni estos dos futuros Hall of Fame.

Malone se fue a probar suerte en los Lakers, pero Stockton decidió retirarse fiel a su equipo de siempre; un año después, el primero hizo lo mismo como el segundo máximo anotador de la historia y el segundo, como mejor pasador y jugador que más balones ha robado. Esta es la historia de un amor imposible, una leyenda, que terminó sin anillo.

Ahora un ruso, un turco y un número tres del Draft son los líderes de un equipo, el de Salt Lake City, en el que mi ídolo Raúl López no encontró su sitio.
Y citando a Daimiel me despido: “El que fuera base de los Jazz hubiera sido lo mismo sin Malone. Hubiera encontrado otro cartero al que entregarle la correspondencia. Malone sin Stockton ocuparía mucho menos espacio en el NBA Register.

Friday, July 14, 2006

Mis lazos con los osos

Sigo con este repaso a varias franquicias con el equipo de Elvis, al que poco de Grizzly le queda. Más que nada por el cambio de ciudad, colores e identidad que ha sufrido en los últimos tiempos y con los cuales, del viejo significado tan solo queda el nombre.

Lo siento mucho si alguien es fan de los Grizz, pero me molaban más en Vancouver, con esos colores, esta identidad canadiense y siendo perdedores en liga regular, no en Play-Off. El cambio a Memphis nunca termino de gustarme, pero allí recalo un jugador que me había llegado como muy pocos en la NCAA lo habían hecho hasta el momento. Shane Battier, el chico del que se dice que será presidente de los EEUU (¿quién soy yo para cuestionar eso?).

Ahora juegan en la ciudad de Tenessee y han cambiado el negro, el verde y el rojo por dos gamas oscuras de color arándano y un amarillo que no termina de convencerme. Así pues, ya sin los únicos jugadores que me mantenían enganchado al equipo (Battier y Williams), los Grizzlies culminan su caída a lo más hondo de mis preferencias.

Solo Gasol, y sin mucho convencimiento, mantiene un pequeño lazo entre los de Memphis y yo. Seguramente el traspaso de Shane sea beneficioso para el equipo, pues llegan un rookie del año en potencia y un viejo conocido en la pintura del FedEx. Pero el oeste es el oeste y la lucha por la postemporada, como cada año, volverá a estar reñida.

Termino por hoy deseándole suerte a Jerry West, y esperando que, por fin, consiga un Center para el equipo.

Thursday, July 13, 2006

Guerreros de vacaciones

Uno de los equipos originales de la liga. Tres anillos de la NBA, dos de los cuales en Philadelphia. Leyendas de la talla de Nate Thurmond, Rick Barry y, sobretodo, Wilt Chamberlain han pasado por sus filas.

Pero su última época triunfal fue entre los ochenta y los noventa, encabezados por el gran Run TMC (Tim Hardaway, Mitch Richmond y Chris Mullin). Y sus últimos Play-Off, los vivieron cuando ni yo ni muchos seguíamos la liga, en el año 1994. En el equipo estaban hombres de la talla de Chris Webber (en su año rookie), Latrell Sprewell o el esmentado Mullin...cayeron a lo Grizzlie, sin ganar ningún partido en primera ronda, aunque en su defensa hay que decir que lo hicieron con uno de los mejores equipos, los Phoenix Suns de Barkley.

Así se llegó a una racha de balance negativo y no presencia en Play-Off histórica, aún habiendo pasado por el equipo hombres como: Guggliotta, Seikaly, Joe Smith, Marshall, Starks, Jamison, Hughes, Richardson, Arenas, Van Exel, Dampier...

La lista de ex-Warriors en el All-Star desde el año 95 es muy extensa, igual que los numerosos errores en traspasos y Draft (Vince Carter-Antawn Jamison es un buen ejemplo).

Y parecía esta temporada, la 2005-06, la elegida para ver luz al final del túnel. La esperanza había llegado con cristal de bohemía Davis, un jugador con el cuál consiguieron un récord muy positivo desde su incorporación. Tendrá que ser la 2006-07, la de la redención. De momento, la llegada de un discutido número alto en el Draft, Patrick O'bryant, y el traspaso de Fisher a los Jazz a cambio de Emmet, D.Brown i McLeod...¿ingredientes para llegar más allá de abril? No lo parecen, pero los Richardson, Davis, Dunleavy y Murphy deben empezar a dar argumentos para hacer resucitar un guerrero muerto.

Wednesday, July 12, 2006

Las raíces del lobo

Aprobechando una tarde que se presenta lluviosa, aquí doy algunos datos sobre mí para que me vayaís conociendo, mi tarjeta de presentación:

Como se ve arriba, mis equipos son Minnesota, LA Lakers, Chicago y Miami. Sigo la NBA desde la temporada 96-97 (que lástima perderme la del 72-10). Por aquel entonces iba con los Bulls, pero en el All-Star del 98 en NYC mi jugador favorito pasó a ser Kobe Bryant, por el descaro y la juventud con que llegaba a la liga. Desde el fallecimiento de los Bulls me pasé a los Lakers de mi tío, aunque mi padre era un Celtic...disfruté de lo lindo con aquel equipo hasta el año 2002, en el que incluso me decanté por los Kings en la final de conferencia. Con la llegada de Malone y Payton me empezaron a aburrir, y me pasé a los Wolves durante aquel año. Garnett fue el segundo jugador del que tuve camiseta, y otro de mis grandes ídolos.

Aquel Play-Off me dejé llevar por los Wolves y por los Heat, que llegaron con gran mérito a segunda ronda en el este. A partir de aquel momento, el cambio estaba hecho. En verano llegó O'neal, pero no terminaba de convencerme. Mucho más me gustó este verano la llegada de White Chocolat, ver a Mourning de nuevo, no echar de menos a Eddie Jones...tambien Derek Anderson, que llegó a medias, y no ha sido aprovechado. Campeones, mi deseo se ha visto cumplido, aunque con Wade me huelo a dinastía...Siempre que Garnett no haga nada al respecto, cosa que ahora mismo dudo.

Además, el tercer uniforme de los Wolves es el que más se asemeja en colores al de mi penya, verde y negro, otro motivo por el que nunca me defraudará el equipo de Minneapolis.

Minnesota's Summer y presentación

Si señor!

Después de estar tanteando que si Garnett a los Bulls, Iverson a Minny, por fin un buen movimiento del amigo Kevin McHale. Llega Mike James, otro chupón a añadir al lado de Ricky Davis, pero que nos deja con un quinteto más o menos aceptable, en mi opinión sería este: Randy Foye-Mike James-Ricky Davis-Kevin Garnett-Mark Blount...nos falta un Center.

Yo me quitaría de encima rapidito a Marko Jaric, pero quien querrá comerse tal contrato. Puede que los Knicks nos hagan un favor, pero sobran guards en mis T-Wolves, y Jaric no es de mis preferidos.

Por cierto, que no me he presentado. Soy un fan de los Wolves, y en menor medida de Bulls, Lakers y Heat. Inspirado por algunos blogs de baloncesto de gran calidad que he ido conociendo he creado el mío. Espero poder estar a un buen nivel de entradas y que vayaís visitandolo. Se hará lo que se pueda, encantado de estar con vosotros!