Friday, October 13, 2006

Espíritu verde y negro I

De modestos inicios a futuros triunfos. Los sentimientos y la historia del tercer club más importante de nuestro basket

Fuí yo quién rompió en mi familia la tradición de ser del Barça, en todas sus secciones. Justifiqué mi cambio alegando lo poco que me gustaba su entrenador: Aíto García Reneses. Ironías del destino, ahora él es el míster de mi equipo, y yo soy quién aplaudo la mayoría de decisiones que toma y lo bien que ha llevado el club hasta ahora.

Gracias el empeño puesto por él y por Villacampa, la Penya vuelve a tener el potencial para desafiar a sus rivales históricos (Madrid y Barça) y los que antaño o ahora osan interponerse en su camino (TAU, Akasvayu y Unicaja).

Pero vayamos por partes; fundado un 30 de marzo del 1930, el Penya Spirit of Badalona contaba con diversas actividades, destacando en ellas el fútbol, especialmente. Dos años después cambiaría su nombre a Centre Esportiu Badaloní y el 1939, finalmente, adoptaría el actual Joventut de Badalona. Ya por aquel entonces el basket era su principal actividad y el verde y el negro, la inseparable combinación de colores e identidad del equipo.

Después de sobrevivir a la dura transición la Penya ganaría cuatro campeonatos de España (1948, 1953, 1955, 1958), además de fundar junto a Madrid y Estudiantes la Liga Nacional en el año 1956. Once años después (67), llegaba el primer campeonato liguero. Los hermanos Margall, Alfonso Martínez y Cortés, entre otros, serían los principales nombres de tal hazaña, pues la liga hasta el momento era cosa de Barça y Madrid.

No sería la última copa que se alzaría en la ciudad, pues dos años después llegaría la séptima copa del rey, por aquel entonces conocida aún como campeonato de España.

La segunda liga llegaría en los setenta, década dominada implecablemente por el Real Madrid de Ferrándiz. Serra, que años más tarde llevaría al Barcelona a conseguir lo mismo, daría a la Penya su segundo título liguero, con Josep Maria Margall aún de cabeza visible del equipo y Santillana, Fernández y Slavnic como otros de los hombres importantes. El 1978 fue un año histórico, que devolvió un título al club dos años después de haber conseguido la octava copa del rey.

Se entró en la década de los ochenta, que se saldó con dos Korac (81, 90) y tres lligues catalanes (87, 88, 89). No se consiguió ningún título liguero, si bien se lograron tres subcampeonatos que dejaron con la miel en los labios (85, 87, 90). Hubo grandes decepciones, pero la base del equipo era jóven (Jofresa, Villacampa, Montero, Jímenez).

El segundo título europeo se consiguió en el esmentado año 1990 ante el Scavolini Pessaro. Comas, Reneses o Julbe habían sido algunos de los que habían entrenado en el club, grandes jugadores dieron lecciones de baloncesto en cada cancha donde jugaban, y la camiseta con el número 7 del mítico Margall colgaba para la eternidad en el Pabellón Ausiàs March.

Las semillas plantadas en los ochenta debían empezar a dar frutos, y así fue como se logró en el 1991, el tercer título de liga y primero desde que se había establecido la ACB. Aquel mismo año, en el Open McDonald's, a punto estuvo el histórico equipo badaloniense de hacer historia, perdiendo por sólo dos puntos ante los poderosos Lakers de Magic y Worthy.


Llegaban tiempos de cambio, pues la inminencia de los juegos olímpicos llevó a la Penya a trasladarse al nuevo pabellón, el Olímpic. De la mano de Lolo Sainz y con jugadores de la talla de Villacampa, Jofresa, Smith, Thompson o Martínez la Penya tenía quizás la mejor plantilla de europa. Pero aquello no fue suficiente...

Aleksandar Djordjevic, mejor base europeo de los noventa, llevaría el título europeo de Istambul a Belgrado, a su amado Partizan. Un triple en los últimos instantes desvaneció el sueño de los de Badalona, cuya plantilla pagó la novatada en su primera visita al olimpo europeo.

El campeonato liguero no volvió a ganarse, Aíto se encargó de ello en el año 1993. Pero no sería hasta el 1994, cuando el que precisamente dos años antes había conducido a los suyos a aplastarlos, Zeljko Obradovic llevaba a la Penya a la Final Four, y ganaba al Barcelona en el primer partido jugado en Tel-Aviv.

Ambiente relajado y poco a perder, fueron claves para que la Penya ganara el título continental, siendo el primer equipo catalán en conseguirlo. Así fue como la más grande generación que ha dado de sí la cantera de badalona, se coronó como el mejor equipo de Europa.

La posterior caída y actual recuperación forman parte de otra historia, la mayoría de la cuál he vivido. Más penas que triunfos, con el objetivo de volver a acariciar los viejos triunfos.

Sonrisas y lágrimas, que estaré encantado de contaros en la próxima ocasión. FORÇA PENYA!!

11 comments:

Pierce said...

Hombre ya te echaba yo de menos wolf!!

Pos yo de toda la vida he sido del Barça tanto en bsket como del futbol, perto simpatizo mucho con la penya que a punto estuvo de liquidar a Magic.

Le esperan buenos tiempos a la penya bajo la tutela de Aito y con crack como rudy o proximamente Rubio. Auqneu claro lo mas probable es que se acaben marchando a la NBA. Todo al tiempo...

Wayne Robinson said...

La historia del Joventut está muy ligada a momentos muy emocionantes de la historia del basket en España. Recuerdo aquella Korac que ganaron gracias a un tiro de Joe Galvin desde más de ocho metros (fue de dos porque en aquella época no había triples) cuando quedaba un segundo. Y qué decir del triplazo se Sasha. A Barthe casi le da un infarto. Me alegré cuando ganaron la Euroliga. Es un equipo que siempre me ha caido bien porque soy del Real Madrid. Y por la misma razón que a los del Barca les cae bien el Estudiantes.

Por cierto Ferrán Martínez ha estado siempre muy sobrevalorado.

Juanejo said...

Claro que si, y bien fuerte ese forza penya!! yo soy demente, y me encanta la penya, como cuida la cantera, su historia, su tradicion y su juego. si señor, grande Wolf!!! Viste a Villacampa contra la anecdota del McDonalds, que ya estaba grabado en el trofeo "Winners: LA Lakers",...como iban a ganar ese partido a pesar de los 10 triplazos que metieron y del ultimo cuarto espectacular de Carlos Ruf retando en defensa a Worthy...forza penya, claro que si!! y forza estu tambien..jejeje.

Jose David Lopez said...

Tengo varios colegas que me hablaron de tu blog NBA, felicidaes.

Yo os invito al mio, aunque es de futbol, pero del bueno.

rafita said...

un equipo de los que engancha aunque no sea tu favorito, sino es por A es por B. hoy dia B son bennett (me encanta), rudy y ricky, unos cracks totales

Juanejo said...

Hay que hacer el Carlos Ruf fans club.

Peter Mihm said...

No cabe duda de que la Penya tiene algo especial. Siempre me han caído simpáticos y su trabajo de cantera me flipa. Además, el verde y negro tiene algo...

Wilt said...

Bueno por lo menos no eres del Barcelona. Datos interesantes (la verdad es que no tengo ni idea de baloncesto FIBA, pero que no salga de aquí, XD). Qué crack Vilacampa, me recuerda a "Loquillo" (que también se había dedicado en un principio al basket).

True Wolf said...

Mañana traigo la segunda entrega.

Negro y verde...buff, ayer buscaba la de Szczerbiak, creo que va a ser la próxima que me compre.

Juanejo said...

jajajaja eres un mago Julius, si que hay que hacer un club de fans de las torres gemelas de la penya, El Ceji Morales y horchatas hispano-finlandesas Ruf

Wilt said...

Por cierto wolf, precisamente en mi post sobre Joan Plaza ponía que aquí, como nadie es del Realmadrid, yo, con mucho orgullo, quería defenderlo, porque está muy bien eso de ser anti-madridista y tal, pero al fin y al cabo el Real Madrid no es, ni más ni menos, que el club con más seguidores, XD.